Pegamentos y adhesivos industriales

Qué son los adhesivos industriales

Los pegamentos y adhesivos industriales, en general, son elementos compuestos de sustancias capaces de realizar una unión entre dos superficies, y que debido a la comodidad que supone su uso, a la amplísima gama de adhesivos industriales existente en la actualidad, y a las altas prestaciones que estos nos ofrecen, han sustituido en muchos casos a los elementos que tradicionalmente se utilizan para realizar uniones o fijaciones, como pueden ser tornillos o remaches. Hoy en día resulta difícil encontrar un producto que no incluya algún tipo de adhesivo, ya sea en el proceso de fabricación, en el embalaje, etc.

Resulta de vital importancia para garantizar la efectividad de los adhesivos a la hora de utilizarlos, el escoger bien el tipo de adhesivo en función de algunas variables como el tipo de superficies sobre las que vamos a aplicarlos, o las condiciones ambientales a las que se van a ver expuestas.

Tipos de adhesivos

Los adhesivos industriales pueden ser clasificados en función de los siguientes criterios.

Según su origen

En función del origen de sus componentes, los adhesivos pueden clasificarse en adhesivos de origen natural y adhesivos de origen sintético.

Los de origen natural son aquellos cuyos componentes proceden directamente de la naturaleza, aunque reciban algún tratamiento para poder ser utilizados en las distintas aplicaciones. Estos a su vez pueden ser de origen vegetal (como por ejemplo las colas de almidón) o de origen animal (como las colas más tradicionales).

Los de origen sintético, en cambio, son diseñados en laboratorios, principalmente a partir de polímeros derivados del petróleo, y son diseñados a medida para trabajar en condiciones muy específicas en función de la necesidad (pegamentos acrílicos, siliconas, etc.).

Según su uso

Este criterio de clasificación es seguramente el más amplio, ya que existen una gran cantidad de usos para los que podemos aplicar adhesivos industriales, pero algunos de los más representativos serían los siguientes:

• Silicona: se trata de un adhesivo inorgánico formado por oxígeno y silicio. Este adhesivo se usa principalmente en el sellado de superficies, como ventanas o cristaleras. Podemos aplicar siliconas ácidas o neutras en función del tipo de superficie sobre la que vayamos a trabajar.
• Adhesivos para PVC: En este caso hablamos de un adhesivo que realiza una unión similar a una soldadura química, y que se utiliza principalmente para unir tuberías, bajantes y desagües, así como otras redes de fontanería. Llegan a soportar tanta presión como las propias tuberías.
• Adhesivos de unión instantánea: se trata de pegamentos utilizados para realizar uniones rápidas en condiciones en las que no se dan las condiciones ambientales o temporales para usar otro tipo de adhesivo. Un ejemplo serían los cianocrilatos. Son adhesivos muy versátiles, pero hay que tener mucho cuidado con ellos, ya que podemos fácilmente sufrir algún accidente al manipularlos, ya que, si por error nos manchamos los dedos y los juntamos, quedará instantáneamente pegados.
• Unión estructural: Son adhesivos que por su composición son capaces de preservar la estructura de la pieza, y que además son capaces de soportar grandes cargas una vez solidifican.

Según número de componentes

Los adhesivos monocomponentes son aquellos que tan solo presentan un componente reactivo, y, por tanto, son presentados en un solo envase, como por ejemplo los anteriormente mencionados cianocrilatos, o las siliconas.

Los adhesivos bicomponentes, en cambio, constan de dos componentes reactivos, y se presentan en envases separados, por lo que para que se inicie el proceso de curado del adhesivo deben mezclarse en la proporción indicada por el fabricante. Un ejemplo de este tipo de adhesivos serían las masillas epoxi bicomponentes.

Según sus propiedades

Según las propiedades mecánicas que poseen, los adhesivos pueden clasificarse en elásticos (aquellos que poseen una gran elasticidad antes de producirse una fractura, como siliconas o poliuretanos monocomponentes), que son más recomendables en situaciones en los que la unión está sometida a posibles vibraciones, y por otro lado, rígidos (aquellos que son menos elásticos, pero son por lo general capaces de soportar una carga mayor, como por ejemplo los poliuretanos estructurales).

Según curado

Los adhesivos se pueden clasificar según este criterio en adhesivos de curado físico y adhesivos de curado químico, necesitando los primeros unas condiciones energéticas como calor o presión para poder realizar la unión, y llegándose al curado en los segundos mediante una serie de reacciones químicas.