EPIs para electricistas

¿Por qué son importantes los EPIs para los electricistas?

Según el Real Decreto 614/2001, de 8 de junio, sobre disposiciones mínimas para la protección de la salud y seguridad de los trabajadores frente al riesgo eléctrico, “los riesgos eléctricos son aquellos provocados por la energía eléctrica. Estos incluyen el choque eléctrico por contacto directo o indirecto, quemaduras por choque eléctrico o por arco eléctrico, caídas o golpes como consecuencia de choque o arco eléctrico e incendios o explosiones originados por la electricidad.”

Por todo ello, es muy importante el uso de equipos de protección que nos protejan de estos riesgos, los cuales pueden llegar a causar la muerte de un trabajador. 

Para evitar estos riesgos innecesarios, es muy importante que las personas que realizan trabajos eléctricos, tengan un amplio conocimiento y formación que les permita identificar y prevenir los mismos. Para ayudar y prevenir estos riesgos, es necesario el uso de los EPIs indicados anteriormente.

Cascos de seguridad

Tienen que tener propiedades aislantes eléctricas que aísle y proteja ante posibles caídas y/o golpes. Este tipo de cascos deben cumplir la normativa EN 50365:2002 (protección para instalaciones de hasta 1000 V corriente alterna y 1500 V corriente continua). Para trabajos en alta tensión existen los cascos clase E, fabricados con materiales no conductores y resistentes a la llama.

Para mayor protección, se recomienda el uso combinado del casco con pantalla protectora aislante.

Gafas y pantallas de seguridad

Es muy importante proteger la cara y los ojos con gafas o pantallas faciales contra arco eléctrico que cumplan la Norma EN 166:2002.

Guantes aislantes

Los guantes de protección están diseñados para proporcionar protección contra uno o más peligros. El material con el que se fabrican los guantes aislantes para trabajos eléctricos es el caucho natural sin soporte, su grosor es mayor que el habitual en otros grupos de guantes y conforme aumenta, aísla o protege contra descargas de mayor intensidad.

Según la tensión de prueba, los guantes son de Clase 00, 0, 1, 2,

3 y 4. Dicha tensión es la que ha sido testada en laboratorio, desde 2.500 V hasta 40.000 V. La tensión mínima soportada es la recomendación de uso. (V* Voltios).

En función de su grosor, el caucho natural actúa como elemento aislante, por ello, un guante de Clase 0 es más fino que un guante de Clase 3. Para evitar que los guantes se fabriquen con un exceso de grosor que suponga una falta de flexibilidad, la norma establece unos valores máximos en milímetros de elastómero o látex.

Calzado dieléctrico

Este tipo de calzado, protege al profesional de un riesgo de muerte, y, por lo tanto, forma parte de un EPI de categoría III. Es un calzado destinado a proteger a la persona que trabaja directamente con la electricidad, por lo que, deberá presentar una gran resistencia eléctrica para evitar que la corriente circule a través del cuerpo humano, es decir, debe funcionar como aislante eléctrico.

En Europa, los ensayos relativos a la norma se realizan llenando el calzado con agua y sumergiéndolo a una profundidad determinada desde la parte superior de la bota según el voltaje de prueba. Solo las botas fabricadas con materiales poliméricos cumplen con la normativa. Este calzado dieléctrico/aislante es ideal para electricistas o trabajadores con riesgo de contacto con la electricidad (Norma Europea aislante sobre mojado EN50321 y en seco).

Ropa ignífuga

La ropa de trabajo ignífuga y antiestática, ofrece protección contra la llama, la chispa y los fogonazos provocados por la electricidad. 

Este tipo de EPI no debe de ser combustible, deben resistir al calor externo por una fuente radiante o convectivo, deben mantener la integridad y la resistencia, toxicidad y transparencia de humos, y por supuesto, deben aportar comodidad al usuario.